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Reflexiones de Christophe de Bruyn como copresidente de la conferencia anual de la ISHC

Como copresidente de la conferencia anual de la International Society of Hospitality Consultants (ISHC) celebrada en Praga hace una semana, me gustaría compartir algunas reflexiones.



¿Volvemos a la normalidad?
Nuestra última conferencia en Europa tuvo lugar en Viena el año 2019. Parece que fue hace mucho tiempo, en otra vida, una vida sin Covid. Aunque volvimos a organizar una conferencia en Estados Unidos en 2021, nuestros miembros no estadounidenses no pudieron viajar. Ahora, a pesar de los nuevos brotes, hemos aprendido a vivir con la pandemia, y hemos tenido la gran oportunidad de vernos en persona. ¡Sin duda toda una emoción!

Tema de la conferencia: Unir perspectivas, conectar, expandir, re-imaginar
La conferencia de este año, inspirada en el Puente de Carlos de Praga, pretendía transmitir un mensaje de optimismo, para crear, renovar y fortalecer los vínculos humanos. Por otro lado, reflejaba la necesidad de comprender y navegar en tiempos de gran incertidumbre con tantos factores de crisis: pandemia, interrupción de las cadenas de suministro, escasez de personal, crisis energética en algunas regiones del mundo, subida de los tipos de interés, impacto del cambio climático, etc., y desde el 24 de febrero, la guerra de Ucrania. Es como la "madre" de las tormentas. ¿Cómo navegar por ella y sobrevivir?

Un sector que se recupera a buen ritmo
Los ponentes del programa destacaron que la actividad del sector turístico y hotelero está de vuelta y con fuerza, en muchos casos cerca de los niveles de 2019, excepto en Asia, concretamente en China, debido a las restricciones de la Covid. En cualquier caso, los datos de STR muestran una recuperación del 90% del ReVPaR en todo el mundo, que está impulsado por el aumento del ADR. La inflación es una de las razones de este aumento, junto con una fuerte demanda en el segmento de ocio.

El segmento de lujo es el que más se ha beneficiado de esta situación. El sector de la hostelería en EE.UU. ha recuperado totalmente los niveles de 2019, mientras que en Europa, Francia, Italia, Portugal y España están liderando el camino de la recuperación.

Todas las sesiones del programa sobre la situación actual y las perspectivas, ya sea a nivel macroeconómico, turístico o del sector de la hostelería, reafirmaron esta recuperación. Desde el punto de vista de la demanda, se puede hablar de una "revancha" del consumidor para los viajes de ocio, después de dos años de no viajar o de hacerlo de forma limitada. Sin embargo, los viajes de negocios y MICE no han vuelto a los mismos niveles de 2019. La gente está viajando por motivos de negocio, pero hay un notable impacto de las reuniones online que parece haber llegado para quedarse, o al menos para reducir la necesidad de las constantes reuniones en persona. En cuanto al MICE, está de vuelta, pero la industria de la hospitalidad está viendo un mayor número de reuniones de grupos pequeños y medianos que grandes. No obstante, 2023 podría ser el año de la recuperación total en cuanto al rendimiento global de estos dos segmentos.

Las consecuencias: Un futuro desafiante y lleno de oportunidades
Debido a la incertidumbre del futuro y a los factores anteriormente mencionados, existen dudas fundadas sobre si el repunte de la demanda es consistente, o se producirá un retroceso de nuevo en el último trimestre de 2022, o a principios de 2023. La inflación, el crecimiento del PIB y la capacidad de consumo son factores clave. No hay una respuesta clara a esta cuestión. Lo que podemos inclinarnos hasta ahora es lo siguiente: hay una mezcla de tendencias en cuanto a la recuperación de los negocios; la evolución de la recuperación es todavía incierta; la recuperación de los precios es buena; y el sector de la hostelería ha mostrado resistencia en una de las circunstancias más difíciles, un cierre total de su actividad.

En este entorno post-pandémico, la forma de llevar a cabo una actividad hostelera renovada se ve afectada por algunos retos, como la escasez de personal o el aumento de los costes operativos, así como por importantes oportunidades como la tecnología, la sostenibilidad o la diversidad de recursos humanos. Estas tendencias son y serán muy relevantes en los próximos años y, apoyadas por la innovación a pequeña y gran escala, ya se están abordando, entre otras, con:

• Mayor flexibilidad para abordar la contratación de personal y la gestión en el puesto de trabajo, aumentando así la atracción y retención de personal


• Tecnología para controlar los costes y mejorar la experiencia de los huéspedes, aumentando la posibilidad de pasar tiempo de calidad con los mismos


• Aumento de las prácticas sostenibles en los edificios y en las operaciones de hostelería, reduciendo así la huella de carbono y aumentando la conciencia medioambiental


• Uso mixto y mayor utilización de los espacios, diversificando y optimizando su rendimiento

Este entorno desafiante empuja a la hostelería a transformarse más rápidamente, ya que nuestra industria está muy atrasada en términos de innovación en comparación con otros sectores relativamente cercanos como los cruceros o el comercio minorista, por ejemplo.

No obstante, a pesar del futuro incierto del sector, confío en que aprovecharemos las numerosas oportunidades que se presentan, haciendo que la industria del turismo y la hostelería sea más fuerte y competitiva que nunca.


Christophe de Bruyn
Miembro de la ISHC y copresidente de la Conferencia